miércoles, 22 de abril de 2009

Aspectos negativos y positivos de la sociedad de la informacion

INFORMACIÓN Y SOCIEDAD DE LA INFORMACIÓN
Si en el mundo contemporáneo hay dos temas que inciden de manera definitiva y
contundente en la vida de las personas, en los contextos productivo y social y,
particularmente en el contexto educativo, estos temas son la información y el
conocimiento.
Comencemos con el tema de la Información y la Sociedad de la Información.
El Dato
El dato (del latín datum), es la mínima unidad expresiva que nos representa algo. El
dato, entonces, es un signo. Un signo es cualquier entidad de la realidad que podemos
percibir y que nos representa algo. Cuando el signo adquiere alto grado de abstracción
y arbitrariedad, se convierte en símbolo. Una señal de tránsito o la indumentaria de
un profesional específico son signos porque están directamente vinculados con la
realidad que representan. En cambio, un símbolo, es totalmente arbitrario,
convencional y abstracto. Por ejemplo, cualquier palabra de nuestro idioma que tenga
algún contenido significativo (sustantivo, adjetivo, verbo…) es un símbolo.
El dato es una representación simbólica (numérica, alfabética, algorítmica etc.) de una
porción de la realidad. El dato no tiene valor semántico (sentido) en sí mismo; pero
convenientemente tratado (procesado), es decir, secuenciado y organizado
coherentemente según un objetivo (sintaxis), cobra sentido, se vuelve “inteligible” y
así, se transforma en información la que se puede utilizar para la realización de
cálculos o la toma de decisiones. Los datos, en su calidad de signos, se perciben
mediante los sentidos (sensación); la función intelectiva los integra coherentemente
(percepción) y, si son de interés para la persona, se almacenan en la memoria. El dato
es un insumo esencial para la generación de la información, los procesos de
pensamiento, de aprendizaje y la construcción del conocimiento.
Aunque el ser humano ha desarrollado diversos sistemas simbólicos, por lo general el
dato adopta la forma de una(s) palabra(s) o término(s) propia(os) del lenguaje natural
que normalmente hablamos. El dato es fundamental en la construcción de las
nociones, conceptos, de los juicios y raciocinios con los que nos hacemos una
representación de la realidad y construimos nuestro conocimiento.
En general, un dato es una expresión mínima de contenido sobre un tema. Ejemplos
de datos son: la altura de una montaña, la fecha de nacimiento de un personaje
histórico, el peso específico de una sustancia, el número de habitantes de un país, etc.

La Información
Por su parte la información es un conjunto organizado de datos procesados, que
constituyen un mensaje sobre un determinado ente o fenómeno de la realidad. De
esta manera, si por ejemplo organizamos datos sobre un país, tales como: número de
habitantes, densidad de población, nombre del presidente, etc. y escribimos por
ejemplo, el capítulo de un libro, podemos decir que ese capítulo constituye
información sobre ese país. Cuando tenemos que resolver un determinado problema,
tomar una decisión o transformar la realidad, empleamos diversas fuentes de
información (como podría ser el capítulo mencionado de este libro imaginario), y
construimos lo que en general se denomina conocimiento o información organizada
que permite la resolución de problemas o la toma de decisiones encaminadas hacia la
transformación de la realidad.
La información está estrechamente vinculada con el lenguaje, con las facultades de
pensamiento, con el aprendizaje y con la construcción del conocimiento. La Ciencia y
la Tecnología han posibilitado a la humanidad la transformación de la naturaleza. La
producción de bienes y servicios se enmarca dentro del esquema mundial globalizado
de la economía de mercado; en ella priman la productividad, la competitividad y las
leyes del mercado. Ello ha tenido consecuencias benéficas en cuanto al uso de
tecnologías que pueden satisfacer las necesidades básicas y mejorar la calidad de vida
de las personas.
Pero, de manera análoga, se han generado igualmente impactos sociales y ambientales
negativos como el aumento en la pobreza de gran cantidad de la población, su
exclusión de los procesos de Desarrollo Humano Integral, el aumento de la violencia y
los efectos de contaminación de ríos, del aire, de la deforestación y degradación de
tierras cultivables, la disminución de la capa de ozono y el calentamiento climático del
planeta.
La información tiene una característica muy importante: puede ser almacenada. En
tiempos primitivos los escribanos, personas muy apreciadas en las sociedades
antiguas, producían y transcribían libros a mano; se crearon las primeras bibliotecas.
La imprenta de Gutemberg posibilitó la producción en serie de libros. Se crearon
también los periódicos. En 1948 Claude Shannon difunde su teoría de la información;
surgen la radio, la televisión e Internet. El avance tecnológico dispara de manera
exponencial la generación de volúmenes cada vez más altos de información en lapsos
cada vez menores de tiempo.
James Watson y Francis Crick descubren las cadenas de información del ADN. Jeremy
Camphbell redefine el término de información desde la perspectiva de la comunicación
electrónica. Norbert Wiener desarrolla el tema de la cibernética dentro de los cuales
la autoorganización de ciertos sistemas se apoya en la Gestión Coherente de la
información.

La Teoría de la información es una rama de la teoría matemática de la probabilidad y
la estadística que estudia desde una perspectiva sistémica la información y demás
componentes relacionados con ella como los canales de distribución, la compresión de
datos, la criptografía y demás temas relacionados. Esta teoría fue iniciada por Claude
E. Shannon a través de un artículo publicado en el Bell System Technical Journal en
1948, titulado “Una teoría matemática de la comunicación”.
En la actualidad de generan cada día enormes volúmenes de información. La
tecnología posibilita el fácil acceso a diversos almacenes y fuentes de información la
que se puede almacenar en soportes cada vez más reducidos. Todos los días se
generan nuevas redes de información y se constituyen nuevos bancos de datos, de
fácil acceso en cualquier momento y desde cualquier lugar del mundo. Esta es una de
las ventajas del avance tecnológico que caracteriza el mundo contemporáneo y de la
globalización.
La Sociedad de la Información
Hacia la década de 1970 se inició un cambio en el funcionamiento de la mayoría de
sociedades del mundo; se dio origen a la denominada “Sociedad de la Información”.
Este cambio se evidencia en el hecho de que los medios de generación de riqueza poco
a poco se están trasladando de los sectores industriales a los sectores de servicios. En
otras palabras, se supone que en las sociedades contemporáneas, la mayor parte de
los empleos ya no estarán asociados a las fábricas de productos tangibles, sino a la
generación, almacenamiento y procesamiento de todo tipo de información. Los
sectores relacionados con las tecnologías de la información y la comunicación (TIC),
juegan un papel de primer orden en este contexto.
En los albores del siglo XXI se habla de “industrias sin chimenea” para aludir a la
actividad productiva y económica del área de servicios, particularmente al de las
Tecnologías de la Informática y la Comunicación TIC. Como todo, esto tiene su lado
positivo y negativo.
Como aspectos positivos se señalan la democratización del acceso a las fuentes de
información y la incorporación de las TIC en todas las actividades humanas; de
cualquier forma, todo ello confluye en la dinámica del mercado internacional donde
priman la productividad y la competitividad, y esto tiene sus adeptos y sus críticos.
Algunos críticos señalan que la sociedad de la información es una estrategia más de los
países desarrollados para con los países más pobres que tendría como finalidad
mantener la dependencia tecnológica.
El reto actual para la mayoría de personas del mundo es adecuarse a las exigencias de
esta nueva sociedad. Las implicaciones en la educación señalan la necesidad de que
las personas accedan a fuentes de información pertinentes y de calidad, analicen la
información, selecciones, almacenen y recuperen la información en el momento
indicado; en una palabra, desarrollar competencias en lo relativo a la “Gestión de
Información” como condición para construir colectivamente el conocimiento.
Según la declaración de principios de la Cumbre de la Sociedad de la Información
llevada a cabo en Ginebra (Suiza) en 2003, la Sociedad de la Información debe estar
centrada en la Persona Humana; en las posibilidades de generar un conocimiento
orientado hacia la satisfacción de las necesidades básicas de las personas y hacia su
Desarrollo Humano Integral, en el Marco del Desarrollo Sostenible, en los niveles
personal y colectivo de manera que se humanicen las condiciones de existencia de
todas las personas del mundo, se reduzcan las brechas económicas, tecnológicas,
sociales y culturales que en la actualidad afectan a la humanidad.
Las posibilidades de acceso y generación de información están relacionadas en
proporción directa con la generación de conocimiento; pero información y
conocimiento son dos cosas bien distintas.